Pues el gobierno mexicano salió al rescate financiero de Altán Redes, empresa que ofrece la Red Compartida que algunos MVNO utilizan. El tema de los rescates financieros se me hace muy complejo. Aparentemente CFE no pudo con la chamba de Internet para Todos (si ni con la de la energía eléctrica pueden) y ahora el gobierno dice que este rescate les ayudará a llevar Internet a todo México. La realidad es que ninguna paraestatal tiene la disciplina operativa para dar resultados, y más cuando los burócratas no rinden cuentas a nadie (en este y en muchos otros países). Desde que se pensó en establecer la Red Compartida era la intención el acceso de Internet para Todos (el sexenio pasado se llamaba México Conectado). Por cierto, según el contrato firmado entre Altán, Banobras y Bancomext-Nafin, una vez que se pague el préstamo, las acciones de la empresa se deben liberar a sus propietarios originales.
Los temores que existen respecto al rescate son que haya distorsiones competitivas y falta de inversiones en el sector, sin embargo, eso no pasó cuando se estableció la red compartida, solo que financieramente no funcionó (esta industria es intensiva en capital). Digo, ya experimentamos con el concepto, que por cierto no ha funcionado en el mundo (según dicen), es necesario aprender de esto. En fin, ya veremos, pero en mi opinión el resultado es de pronóstico reservado, tema que desde 2015 ya estaba en la mesa. Los retos de Altán se veían desde hace muchos años.
En México, me parece, no sabemos las empresas jugar bien con otras empresas para proyectos conjuntos, sobre todo si son grandes, desgraciadamente esa es la realidad y proyectos como el de la Red Compartida requieren de trabajo en equipo, de escalamiento más allá de un país para ser rentables y también que se sepa del negocio. Se le apostó a que empresas grandes hicieran el proyecto en vez de pensar en que una industria se puede desarrollar con muchas empresas más pequeñas (Brasil por ejemplo tiene 15,000 proveedores de servicio de internet registrados, dando servicio a 3,470 de las 5,570 municipalidades brasileñas). El mensaje actual sobre la Red Compartida es el mismo que en el 2016. A veces tener buena memoria es un castigo, sufres mucho al recordar lo que habías pronosticado que no funcionaría y también recuerdas lo que habían prometido con la Red Compartida.
Total, que “les dieron espectro, fibra, lana para el despliegue y además, te voy a pasar los contratos del gobierno” (como escribió un amigo allá por 2017) y como quiera no funcionó financieramente. No quiero ser “sospechosista” pero me quedan muchas dudas sobre la quiebra y el rescate, sobre todo que en la pandemia no nos dieron apoyos económicos a ninguna empresa.
Al final del día, el tema de cobertura para la red requiere entender de la economía del servicio, las inversiones que se deben hacer y los estímulos y regulación necesarios (y datos sobre la población a cubrir y sus características económicas), también entender que “no hay lonche gratis”. Por ejemplo, la regulación actual en telecomunicaciones se centró en el tema de competencia, pero no en el de cobertura.
En las zonas rurales además de que existen menos usuarios, existen menos recursos disponibles por parte de los usuarios, por lo que es necesario pensar en temas de estímulos innovadores y también de que los que tenemos acceso pensemos en pagar coberturas de fondos para que los demás tengan acceso (una especie de fondo universal de acceso), pero con transparencia en el destino y origen de los recursos destinados al tema de Internet para Todos. Actualmente los IEPS a telecomunicaciones no sabemos qué destino puntual tienen (cómo casi todos los impuestos que contribuimos).
En resumen, el acceso universal necesita de innovación, no es un tema de meterle dinero solamente. Además de que el dinero que se le mete, es dinero producido por todos los que pagamos nuestras contribuciones.
Aunque si el tema de internet lo manejan como con el del agua en Nuevo León, no sé qué podemos esperar. Eso sí, el acceso de Internet a toda la población continúa siendo un reto en todos los países, ya sean ricos o pobres.
Hoy acaba una era al terminar Microsoft con el soporte de Internet Explorer 11 en Windows 10, probablemente no signifique nada para usted pero IE en un punto en el pasado dominó el mercado de navegadores, para ceder hoy en día el liderazgo a Chrome. No duden que algunas aplicaciones legado solo soporten IE, Edge tiene un modo de compatibilidad con Internet Explorer.
Que disfruten de un excelente miércoles.
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