Esta semana en el marco del EGADE Business Summit, Vijay Govindarajan y Andrés Oppenheimer, entre otros, compartieron su visión sobre las oportunidades de la Innovación, el primero bajo el concepto de “Reverse Innovation” y el segundo bajo la óptica de lo que significa la innovación para latinoamérica.
En estas líneas trataré de resumir las tesis de cada uno de ellos presentadas en sus libros.
El concepto de “Reverse Innovation” o “Innovación en Reversa” busca sensibilizar a las multinacionales respecto a las oportunidades de desarrollar productos y servicios innovadores en economías emergentes o en desarrollo y luego en llevarlas a los países más desarrollados. La estrategia tradicional de las multinacionales es llevar productos y servicios desarrollados en países “ricos”, con modificaciones ligeras, a los países en desarrollo.
Vijay nos indica que la globalización tradicional se basa en la idea de que la gente en los países pobres aspira a lo que tienen los países ricos. Sin embargo esta estrategia no reconoce diferencias culturales y de casos de uso. Nos indica que esas diferencias son importantes y nos presenta como algunas grandes transnacionales solo “glocalizando” sus productos no pudieron avanzar en mercados emergentes como los de China e India. De hecho hasta Walmart está llevando a los mercados ricos lo que ha aprendido en los mercados de países en desarrollo en donde ha tenido que adaptar su formato a las realidades de los mercados locales.
Existen, de acuerdo al autor dos mecanismos distintos por los cuales las innovaciones en reversa se hacen atractivas para el mundo desarrollado, estas son: mercados actuales marginalizados (mercados no atendidos o ignorados) o mercados de corriente principal del futuro (cuando la innovación en reversa eventualmente se convierte atractiva al mercado).
En su libro “Reverse Innovation” presenta en qué consiste esta estrategia, presenta un “playbook” y ofrece 8 casos de empresas multinacionales que han logrado aplicar estos conceptos. Una lectura interesante para todos aquellos interesados en la innovación y que además para nuestro caso. es decir, que vivimos en latinoamérica y en México que son regiones en desarrollo nos ofrece un panorama de oportunidades.
El concepto de “Reverse Innovation” es al final del día una variación del “Blue Ocean”. Interesantes los casos de éxito que presenta de empresas como John Deere, Logitech, GE entre otras.
El concepto requiere entender la cultura de los países emergentes en el contexto de tus productos o servicios y encontrar el escalar el concepto hacia los países desarrollados. Sin embargo la “Reverse Innovation” requiere empezar en un “estado limpio” ya que existen 5 brechas de necesidades entre las economías en desarrollo y las economías desarrolladas, siendo estas brechas en rendimiento, infraestructura, sustentabilidad, regulatorias y de preferencias, cada una de estas presenta oportunidades y retos. La “reverse innovation”, se debe desarrollar en sitio y entendiendo bien la cultura de la economía emergente, ya que todo lo que sabes como ejecutivo de una multinacional lo debes de desaprender.
Andrés Oppenheimer, por su parte, en su libro ¡Crear o Morir! presenta el caso de la innovación para América Latina. Su tesis está basada en que la innovación, empieza y termina por la gente. La buena noticia, de acuerdo al autor, es que no es un tema de recursos, sino de actitud. Nos presenta el concepto de las 3 T (Tolerancia, Tenacidad y la última se las dejo de tarea). La mala es que tenemos que cambiar nuestra percepción al fracaso, las fallas y el riesgo.
En su libro, Oppenheimer nos presenta casos de innovadores algunos de ellos latinoamericanos, españoles y norteamericanos. El libro contiene entrevistas, entre ellas a Jordi Muñoz, Emiliano Kargieman, Enrique Gómez Junco, Pep Guardiola, Luis von Ahn, Gastón Acurio, Rafael Yuste, Bre Pettis, Salman Khan y nos ofrece una panorámica de lo que piensan estos innovadores, los retos a los que se enfrentaron y cómo ven al mundo en el futuro.
Lo interesante del libro de Oppenheimer es que toca el tema de la innovación en latinoamérica y son pocos los autores que lo cubren.
Para Oppenheimer, la cultura y la educación, son centrales. Con su muy característico estilo, Oppenheimer hace preguntas difíciles a los entrevistados sobre los retos de las innovaciones en las que trabajan o han trabajado.
Para concluir el libro, Oppenheimer nos habla de lo que a su juicio son los 5 secretos de la innovación: Crear una cultura de innovación, Fomentar la educación para la innovación, Derogar leyes que matan la innovación, Estimular la inversión en innovación, Globalizar la innovación. En resumen, es el talento.
Coincido con Oppenheimer en que “necesitamos un Messi de las ciencias, un Neymar de la Tecnología”, sobre todo en latinoamérica.
De hecho, al ver ambos libros, veo que lo que ha hecho Gastón Acurio es una muestra de lo que comenta Vijay Govindarajan.
En fin, el reto es perseverar, ejecutar, no temer al fracaso, mejorar nuestra aversión al riesgo y encontrar cómo reducir el estrés que nos ocasiona la incertidumbre de la innovación. Y lo más importante, tener bien puestos los pantalones ya que la innovación no es un tema para débiles del corazón.
Si Latinoamérica quiere avanzar, es necesario no tener miedo al fracaso, actuar, escuchar, leer, aprender y estos autores/investigadores nos dan una pauta. Claro que no debemos dejarnos ir tampoco por el “Management By Best Seller” pero pensándolo bien, debemos abrir nuestra mente, lo cual es al final del día lo que nos puede conducir al liderazgo en innovación.