Uno de los retos a los que nos enfrentamos en esta pandemia es el de lograr un balance en diferentes aspectos, trabajo remoto y colaboración, economía y salud. Siempre hemos partido desde la base de que están en extremos de una balanza.
Sin embargo creo que es necesario analizar los datos para determinar si en realidad esto es así. Por ejemplo, uno de mis socios me envió este artículo: Which countries have Protected both Health and the economy in the pandemic? Se me hizo interesante el análisis de la reducción en el PIB y la cantidad de defunciones y cómo existen países que aunque han tenido las mismas caídas en actividad económica, sus tasas de mortalidad son muy diferentes, sin embargo creo que son más las variables que se deben analizar ya que este fenómeno es multifactorial y también que el bicho ha cambiado, nada para preocuparse, pero como otros virus, la mutación forma parte de su naturaleza. Para los científicos de datos en este tema existe una mina de oro para analizar.
Y me puse a reflexionar al respecto de este balance. De hecho ese no es el único al que en tecnología nos enfrentamos, por ejemplo, existe el balance entre seguridad y usabilidad. En este caso si la seguridad se diseña desde el principio en el producto o servicio podemos tener usabilidad, por ejemplo, el automóvil es uno de esos productos. En dónde la seguridad se ha integrado desde su diseño y tenemos usabilidad.
En administración de riesgos tenemos también “trade-off’s” que considerar (me gusta más la palabra “trade-off” para describir este fenómeno). Un ejemplo que se me ocurre es el de viajar a una ciudad con gran actividad sísmica, lo hacemos, ya que hacemos un balance entre los riesgos y los beneficios de ir a dicha ciudad. Dos ciudades destino que se me ocurren son la de San Francisco y la CDMX.
Definitivamente en estos meses de pandemia sabemos más sobre el bicho, es cierto que existen todavía muchas incógnitas y probablemente entre más sepamos sobre él, nos daremos cuenta de que sabemos muy poco. Sobre todo en el tema de los virus. Lo que me queda claro es que el virus no es un ser vivo y no se mueve solo, no tiene deseos ni aspiraciones (salvo la de reproducirse) y por cierto, si el virus mata al huésped, las posibilidades de transmisión son menores.
Creo que la pandemia, al menos en el mundo de la tecnología ha traído beneficios, por ejemplo la colaboración entre sociedad civil, iniciativa privada y gobiernos. También ha aclarado mitos sobre el trabajo remoto, que si bien es cierto, en términos de cultura organizacional y colaboración es un reto, estoy convencido que se ha demostrado que los empleados son profesionales maduros, esto aunque algunos ejecutivos consideran negativo el tema.
Es muy sencillo asignar culpas, el verdadero reto está en encontrar las soluciones y creo que hoy estamos en mejor forma para mitigar los riesgos relacionados con este virus y en esto existen grandes oportunidades. No dejemos que el miedo nos venza antes de enfrentar el reto de una reapertura económica, eso sí, blindados con lo que sabemos funciona: evitar los espacios conglomerados, cerrados, mal ventilados y el contacto cercano, lavándonos las manos, guardando la sana distancia y usando cubrebocas y caretas. Aplicando pruebas, siguiendo contactos, aislándolos y siendo sobre todo responsables. Y claro, la tecnología puede ayudarnos en esta nueva realidad, no me gusta el término de nueva normalidad, ya que soy de la idea que el mundo, tal y cómo lo conocíamos cambió.
Y sí, para algunas empresas la situación no será sencilla, pero para eso habrá que aplicar nuevos e innovadores modelos de negocio. Por ejemplo, un cine está ofreciendo salas para exhibiciones privadas para grupos pequeños, no se sí iré, pero se me hizo interesante el concepto. En el tema de los gimnasios, pues habrá que ver como hacer al aire libre el entrenamiento y a sana distancia, y bueno, los casinos, esos si no me preocupan mucho. En el tema del aire acondicionado y la ventilación también habrá innovación, lo que conlleva el rediseño de los espacios de trabajo.
Disfrutemos, aquellos que podamos hacerlo, el no tener que enfrentar el tráfico y la agresividad en este. Que tenemos la oportunidad de estar en familia y ser productivos. En fin, meditemos al respecto y encontremos soluciones trabajando en equipo.
Tal y como en seguridad de información y muchas otras áreas como el emprender, innovar y sacar nuevos productos, existen riesgos, pero hemos aprendido a trabajar en mitigarlos y seguir adelante.
Muchas de estas medidas no solo mitigan el riesgo de este virus, sino el de muchas otras enfermedades. Lo que si es un hecho, es que este año tendremos, muchos, muchísimos decesos en nuestro país.
Que tengan un excelente miércoles, muchas gracias a los que me siguen leyendo (qué son como 5) después de 23 años cumplidos por BitCasting ayer 8 de septiembre.
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