Buen día estimados y fieles lectores, ayer redacté un editorial, mismo que publicaremos el próximo lunes, en donde cubro la estrategia multidispositivo, multisistema operativo de Microsoft, sin embargo al escribirlo puse algo que me hizo cambiar de opinión sobre que publicaría primero y lo que me dí cuenta es que Apple está en el camino que conduce a dejar de entender a sus clientes, no son grandes fallas, pero sí, a mi juicio, un “tipping point”.
Primero, un poco de antecedentes, utilicé una computadora de Apple allá por 1980, mi primera laptop Apple la tuve allá por 1993 y durante estos años he sido de manera personal un cliente leal de la empresa, noté que bajó la calidad de sus productos un poco cuando empezó a crecer su base instalada, justo después del lanzamiento del iPod, pero se recuperó y he sido un cliente leal por muchos años.
A fines de los 80’s se dió la oportunidad de usar la NeXT y cuando Apple compró a NeXT pensé que algo bueno sucedería y así fue. La NeXT, de alguna manera vive en cada iPhone y en cada equipo con Mac OS X. Soy de la vieja escuela, siempre me ha atraído Unix, uno de mis primeros trabajos fue desarrollar un modelador de sólidos sobre un ambiente Unix. Creo que todo aquello que ha pasado la prueba del tiempo como este sistema operativo es digno de la empresa, pero bueno, no todos piensan así y que bueno, sería muy aburrido el que todos pensaran igual.
Durante muchos años he seguido usando equipo Apple, la Mac por ejemplo la considero una excelente herramienta para el profesional independiente. Para aquel que no tiene un equipo de soporte informático detrás. Todo aquel que tiene que valerse por sí mismo en temas de cómputo debería ver a la Mac como una opción viable y más ahora.
En el campamento empresarial, lo primero que hice cuando me desempeñé como CIO fue convencer a la dirección general de la empresa para que todo el equipo de desarrollo “senior” tuviera acceso a un equipo Mac, así como dos monitores para que fuera más productivo (es decir, una configuración bicéfala), también para evitar problemas de soporte (ya que los ingenieros de la empresa están para atender a los clientes) recibí el apoyo de la Dirección General para que todos los directivos de la empresa contarán con una Mac.
En mis sueños más salvajes visualizó que las empresas también tengan equipo Apple (aunque para Apple desde hace muchos años, la empresa no sea su mercado meta), sin embargo, existe una gran inversión ya realizada en infraestructura Microsoft (y algunas herramientas de seguridad no disponibles en esta plataforma) por lo que veo difícil que Apple avance en la empresa en los escritorios, sobre todo en México (hace meses IBM anunció que daría a sus empleados en EE.UU la opción de contar con Mac’s y ya hasta las promueve en la TI empresarial), El iPhone si tiene posibilidades de seguir avanzando en las empresas del primer mundo, aquí en México es otra historia, aquí lo que veo es Android (desarrollar para esa plataforma es una pesadilla por la cantidad de modelos que existen), pero a las empresas no les gusta depender de un solo proveedor como es en el caso de Apple y en Android y en equipos PC’s existen muchas alternativas.
Dicho lo anterior, aunque me desvié, regreso de nuevo a lo que estaba.
Hasta aquí todo bien, sin embargo la semana pasada reemplacé mi iPhone al modelo más reciente de la empresa y cual fue mi sorpresa que el migrar el Apple Watch al nuevo aparato no fue lo que Apple nos ha acostumbrado. ¿Habré cometido un error? Puede ser, pero no pude migrar fácil y rápido, tuve que volverlo a aparear y reinstalar su contenido desde el respaldo, lo cual me tomó unos 30 minutos. En cambio al migrar la banda de Microsoft en ese mismo aparato, no tomó más de 1 minuto. Otros accesorios como mi medidor de presión, la pesa y el glucómetro los migré fácil y rápido (sí, ya soy un chico malo, malo del azúcar, de la presión – todos controlados por cierto).
Creo que aunque Apple entiende de dispositivos, le falta aprender de accesorios inteligentes ligados al dispositivo y eso, en esta era del Internet de las cosas, se puede convertir en una pesadilla para el usuario. Imaginen que Apple saca al mercado un concentrador para el Internet de las Cosas y que cuando lo cambies, tengas que reinstalar todos los accesorios, para mí este pequeño hecho al que me enfrenté es una “red flag” de que algo está cambiando en Apple.
Por otra parte, el Apple Watch sigue sin poder hacer análisis de sueño y eso me parece una función básica de todo dispositivo que pongas en tu muñeca (en el buen sentido de la palabra), es cierto, existe un app de terceros pero consume mucha batería del Apple Watch.
Esperemos que Apple aprenda y nos entregue a lo que nos acostumbró: Productos de calidad con una experiencia de uso excelente. Pero Apple está cambiando y Microsoft también.
Que tengan un muy buen fin de semana.